Se ha elaborado con uvas de viñas viejas de muy baja producción, principalmente de garnacha blanca, con un toque de macabeo que suaviza el conjunto. El 80% del vino ha fermentado y envejecido en barricas de roble francés durante 6 meses, el resto en depósito con el fin de obtener un vino que destaque por su untuosidad, frescura y post-gusto, conservando el carácter de la tierra que la ha visto nacer.

La ilustración ha sido realizada por Oriol Malet e intenta representar un sueño de sensaciones e ilusiones provocados por las emociones olfativas y del gusto que nos puede transmitir la experiencia de cata de Jaspi d’Or.

CATA:

Color pálido limón, limpio y brillante. En nariz encontramos una buena complejidad de aromas penetrantes de flores blancas y frutas, aromas de hierbas de bosque y toques de especias dulces de la crianza en barrica. Entrada fresca, buen ataque de frutas blancas maduras y hierbas de bosque, untuosidad bien equilibrada con el frescor. Potente y delicado, con un largo post-gusto. Elegancia de la Terra Alta